El Parador de El Saler transforma bolas de golf no recuperables en un nuevo material útil como ejemplo de economía circular
El Campo de Golf de El Saler (Valencia) de Paradores recoge, trata y recicla bolas de golf deterioradas y ‘tees’ de plástico y los transforma en mobiliario y nuevo material deportivo. Ello en alianza con Ecocidi Residuos y la Universidad Politécnica de Valencia.
Con la mezcla polimérica resultante se fabrican contenedores, marcadores de salida del campo y nuevos ‘tees’ de juego que se están incorporando a las instalaciones
1000 millones de bolas de golf suelen acabar en la incineradora o en vertederos
El primer sistema integral de recogida y reciclaje de bolas de golf y tees de plástico fuera de uso.
Cada año se producen en el mundo 1.000 millones de bolas de golf. La mayoría no reciclables y con un destino final muy poco sostenible.
Paradores, Ecocidi Recursos y la Universidad de Valencia desarrollaron una mezcla polimérica exclusiva que convierte estos residuos en una nueva materia prima apta para fabricar
- contenedores
- marcadores de salida
- nuevos tees de juego
que ya están siendo incorporados a las instalaciones del Parador.
Hasta ahora, las bolas de golf dañadas se reacondicionaban siempre que era posible para ser usadas como bolas de golf de segunda mano.

Sin embargo, cuando eso no era posible, eran desechadas sin posibilidad de reaprovechamiento. Hasta ahora su reciclado resultaba muy difícil al componerse de caucho, plástico y goma, con lo que su final suele ser siempre la incineración o los vertederos.
Su principal problema ambiental es su lenta descomposición, entre 100 y 1.000 años, durante la cual liberan micro plásticos y sustancias químicas tóxicas como zinc y acrilatos.
Este proyecto marca un antes y un después porque, por primera vez, se podrá usar ese componente para fabricar nuevos materiales y productos y reducir el impacto ambiental que genera la fabricación de bolas de golf.
